top of page

EPISODIO FINAL

Salió el sol lentamente. La hora señalada. Estábamos los dos tirados envueltos en un pedazo de lona que encontré por ahí . Mi boca sabía a muerte. A final. Adolfo subió la escalera y trató de ponerme de nuevo en el momento.

_ Juan, levantate de ahí querés que llegan en cualquier momento.

Suelo despertarme de mal humor un dia normal. Así que imaginen cual era mi ánimo. La luz diurna invadía todo. Ahora Mía sólo era un cadáver. Un pedazo biológico rumbo a la descomposición y al olvido.

Bajé las escaleras en silencio.

_ Juan, creo que llega el principio del final.

_ ¿Newlight?

_ Exactamente, estábamos detrás de Legión pero no eran ellos los que poseían al mesías… nos equivocamos, entramos por la puerta incorrecta. Nos usaron. Debíamos ser testigos del nuevo comienzo… pero nos equivocamos, te llevé hasta un lugar que no podrías haber pisado nunca. ¿Te das cuenta de todo, no?

Miraba sus labios moverse sin sentido. No me importaba nada de nada. Mientras cada vez más luz entraba se escuchó la llegada de dos móviles 4x4. Se quedaron frente a la casa. Sin hacer nada.

Mi tío sacó un arma de su bolso y la puso en mi mano. Me miró a los ojos con cierta compasión.

_ Escondete atrás. Pedí una reunión a solas pero vinieron con invitados. Agarrá esta pistola y preprarate para cualquier cosa.- tiró de una parte de ella y quedó cargada.- Hay una puerta por detrás. Si vas a huir esperá a que me maten. Esa es la señal. Si muero todo va a depender de vos. Esta es tu historia, lo que viste y viviste es sólo una mancha en el cuadro. Estamos metidos hasta el fondo en una trama que no era para nosotros. Metimos la pata. Debíamos conectarnos con Newlight y no perseguir a Legión. Vos tenías que escribir sobre el bien y no sobre el mal… nos dejamos llevar por Mía, o quien sea, tal vez era un agente… así que aquí están, el final, la verdad, los chicos de las soluciones. Por lo visto vienen armados, así que no creo que llegue esto a buen puerto. Escondete. Dejame a mí. Voy a tratar de negociar. Sabemos todo. Y sólo queremos que salga a la luz. Nada más. No sé que quieren, puede que sólo intenten sacarnos del medio o involucrarnos aún mas. Por si a caso te mantenés en guardia, si me quiebran escapá por el fondo. No confíes en nadie. El destino mas lejos es el más seguro. Tomá esta guita. Por un tiempo te va a alcanzar. Pero luego te vas a tener que arreglar por tu cuenta. Juan, me juego todo en esto. Creo que es lo correcto.

El arma latía en mi mano. La muerte venía. Mejor dicho ya había llegado. Mía era un aviso. Su quietud era la forma que tenía para decirme que la muerte era en definitiva la justificación de la vida, porque era así como funcionaba el teatro, buscamos en la vida todo lo que pueda justificar nuestra muerte. Todos nos mentimos. Nunca nos va a llegar. Somos invencibles. Lineales. Chatos. No importa cómo pero vivir es nuestra consigna. Somos la especie que se propagó por el mundo imaginando dioses crueles y vengativos. Tenemos el control. Quemamos el mundo. Lo hicimos nuestro. Vamos a destruirlo. Y volverlo a construir.

_ ¿ Por eso la llegada de un nuevo Dios? ¿Sólo éso? ¿Una nueva forma de acomodarnos en el mundo?

_ Andate ahora, están llegando.

Por dentro quería quedarme y usar el arma para terminar con todo. Me sentía perdido sin Mía.¿ Era un agente? No importaba. Apenas si la había conocido pero dentro de mí, su pérdida generaba descontento y violencia. Quería apretar el gatillo hasta que hiciera click, click. Basta de todos. Caminos cerrados. Luces apagadas. Cosas sin hacer, eran mi mayores preocupaciones, siempre que alguien te saluda te pregunta cómo te va… porque la vida es un camino recto hacia el mismo final.¿Como te va? ¿ Es lo que planeaste? ¿ Pensaste en la muerte? ¿Te acordás de ella? Está ahí la muy maldita, esperando el momento. Y ese momento me llegó al fin. Pero antes debo llegar al final de la historia. Todo este recorrido para saber que en definitiva no valía la pena. Morder tierra sólo deja sabor amargo. Así me sentía, con un horrible sabor en la boca. Pase lo que pase ya había perdido. Lo único que me podía llevar de todo esto se lo habían llevado otros. Traté de putear a mi tío pero no me salió nada. Le quité el seguro al arma y me deslicé lejos del encuentro. Hubo un gran silencio, luego se abrieron las puertas. Me apoyé contra una pared. Y agudicé mi oído. Si escapaba seguro irían tras de mí. Si me quedaba por lo menos podría saber un poco más. Me acerqué a la puerta para presenciar lo que estaba por ocurrir, se escuchaban unas voces…

_ Dogo, no intentes nada, vine con gente.

_ Habíamos dicho que vendrías solo.

_ Imposible, menos con los de Legión dando vuelta. ¿Dónde está el chico?

_ Oculto. Esperando mi señal para sacar todo a la luz.

_ Perfecto. Es lo que esperábamos. ¿Y cuál es la señal?

_ Mi muerte, al fin.

_ Todos tenemos una razón de ser, yo me quedo con eso, no es mucho pero sirve un poco.

_ ¿Cuál es mi razón?

_ Tu razón era seguirnos a nosotros, descubrir la llegada del mesías, pero te equivocaste de objetivo, Legión intenta obtener mando. Nosotros conservarlo. ¿Cómo? Manejando la historia, lo que hoy ocurre será ley mañana. Estamos preparando el terreno para el futuro. La palabra de Dios de nuevo en la tierra. Eso es por lo que peleamos todos. Pero tenías que hacer cagada… por suerte vamos a enmendarlo, …me refiero a todo.

Me acerqué más para no perderme nada. Seguían con eso del mesías. Dale que dale. Como si el mundo necesitara de un salvador. La verdad es que estábamos cagados. El calentamiento global, la mierda de todos que nos llegaba hasta el cuello, los que tienen más no se preocupan, los que tienen menos ni lo saben. Bailábamos una danza final, al ritmo del progreso, del futuro, de esa mentira cotidiana que nos hacen tragar como si fuéramos sólo animales encerrados. Sólo eso. Vivimos lo que nos dejan vivir. Si nos falta no hay forma de compensarlo, si nos sobra es sólo suerte. Maldita suerte, hoy está y mañana no.

_ ¿No pretenderás que crea en eso?

_ Si creés o no es lo de menos. Ya está en marcha, y no sos vos un inconveniente para ello.

_ Sólo quiero saber… ¿es real o no?

_ Eso no importa… sólo necesitábamos alguien que sea testigo de la lucha que se lleva a cabo. El futuro está siendo escrito ahora… esta charla, por insignificante que te parezca estuvo planeada desde un principio. Vengo a pedirte que hagas lo que siempre supiste que debías hacer. ¿ Dónde está el pibe?

Se escuchó un arma prepararse para hacer lo suyo. Ese sonido matemático y certero que hace un arma al cargarse. Yo tenía una. La levanté junto a mi cara como si eso me diera mas poder, o algo. Pensé en “La pandilla salvaje”, qué mierda… hay que morir a los tiros.

_ ¿El falso escriba?

_ Llamalo como quieras… necesitamos que cumpla con su rol.

_ Es un pobre boludo… sin importancia.

_ No trates de cubrirlo. Tengo que hablar con él.

_ Imaginé que todo pasaba por él. Es el que importa.

_ No creo que tengas idea de dónde asomaste el hocico, no es una operación de agentes. Vine personalmente porque te conocemos. Creo que al menos merecías una explicación…

_ De que me sirven si van a matarme. Ustedes, los que sean, manejan el mundo, y a los que hacen algo por él.

_ ¿Dónde está la chica?

_ Muerta, arriba.

_ Es una lástima… tenía todavía mucho por hacer…

Me acerqué a la puerta aún más, si hablaban de ella era mi asunto, en realidad cada momento que viví era mi asunto, mi vida era mi asunto, si me estaban usando era mi asunto. Tenía que ponerle fin a esto. Y sólo había una manera de hacerlo. Así que cometí un gran error y entré en escena. La escena final.

Apunté el arma como si supiera y avancé con pasos firmes, calculados, alguien antes que yo había guionado esta escena. Adolfo levantó la mano para indicarme que no haga boludeces, el otro tipo ni se inmutó,al parecer la armas no lo asustaban, sólo se limitó a sonreir levemente. Una sonrisa de satisfación.

Fue Adolfo quien rompió el silencio:

_ Juan, sacá el dedo del gatillo, por ahora no es necesario.

_ Claro que es necesario, me parece que voy a matarlos a los dos, un par de tiros a cada uno y se termina la historia…¿no?

_ Antes quisiera presentarme Juan, que sepas quien soy, y sobre todo explicarte porque estamos acá. Podés llamarme Señor Esquela.

_ Todo este asunto del mesías sí, sí, ya está, basta de boludeces, están locos, juegan a los soldaditos como si fueran chicos, se acabó, nada de lo que tenga para decir me importa.

_ Debería.

_ ¿Sí? ¿Por qué?

_ Porque tenés que escribir sobre eso. Sino sabés todo no vas a poder hacerlo.

Miré a mi tío.

_ Pensé que esto de escribir la historia era idea tuya.

_ No - Admitió.- fue idea de el hombre estaba en aquel galpón, el padre de Mía.

Mía otra vez. Estaba lleno de odio. Su nombre encendía mi furia.

Sólo era un usado mas.

Levanté el arma con intenciones serias. Apliqué presión en el gatillo y de pronto explotó en mi mano. Una repetición de disparos al azar. Los disparos dieron ruidosamente contra el suelo. Ambos se quedaron firmes. Los que si se movieron fueron los dos grandotes que acompañaban al señor Esquela que al parecer tenía la posta. Entraron de golpe, uno era delgado con un rostro con puntas angulosas y ojos saltones, parecía un ave loca, el otro apenas si lo vi del cagazo. Era redondito, tirando a obeso, no le vi la cara pero llevaba una ametralladora muy cortita apenas si entraba en la palma de su mano rechoncha , de todos los ocupantes de la habitación parecía que era el que más ganas de disparar tenía.

_ Estoy dispuesto a matar.

_ ¿Para qué? No es tu objetivo, solo tenés que relatar lo que ocurrió, o lo que está por ocurrir.- Giró hacia los recién llegados gracias a mis disparos inoportunos y al pedo.- No disparen sólo vamos a hablar. Esta todo bajo control. Vamos a seguir hablando tranquilos. ¿estamos? Nadie va a disparar. Y vos Juan tampoco.

_ No voy a disparar si contesta mis preguntas.

_ Hubieses empezado por ahí, nada me dará mas placer.

_ Te dije que escapes boludo, ahora estamos muertos los dos.

_ Dogo, no ladres. Ya es tarde.

_ Le recuerdo que está hablando conmigo ahora. ¿ Que hay detrás de todo?

_ Si hubiésemos querido matarte ya hace rato que estarías en la eternidad, para que me gastaría en explicarte todo si luego voy a matarte. Te necesitamos, Juan, tu tarea es necesaria para encausar el futuro. Quizás te sea difícil entender al principio pero date tiempo a digerirlo, a entender la razón de todo ésto, no te apresures sólo pensá, nada más. Pensá.

_ ¿Me está hipnotizando?

Me miró sin saber que responder, y continuó:

_ El mundo está dando sus últimos estertores antes de morir. Si el noticiero de hoy te pareció aterrador esperá a ver el de dentro de diez años. Lo sé porque ya estamos trabajando en ellos. Estamos haciendo borrón y cuenta nueva, sólo que esta vez hay un plan.

_ Ahí entra el mesías.

_ Sí, el negrito.- Escupió Adolfo con asco.

_ Exactamente, no es la política el futuro de la humanidad, al igual que al comienzo de todo, la religión va a ser nuestro orden, una nueva religión obviamente, única, pero con equidad, sentido social y hasta conciencia ecológica, una única forma de sobrevivir al gran desenlace, así se conocerá el final tan anunciado por todas la religiones. Pocos sobrevivirán, y serán guiados de nuevo hacia el gran jardín donde el mal no crece. África será el nuevo comienzo, como siempre. El resto del mundo será inhabitable. La era industrial terminará por aniquilar al hombre, hay que ponerle un fin y volver al origen, las aldeas son el futuro.

_ ¿Por eso lo del mesías negro?

_ Sí y no, es simbólico nada más, no era necesario llegar a tanto pero asi se decidió. Tendrán sus motivos. Unas cuantas guerras más y Africa estará lista para recibirnos.

_ No me imagino a unos cuantos ricachones siguiendo a un negro.

_ Eso no va más, lo de la raza superior es cosa de europeos, nostálgicos de los viejos imperios. No, no queremos esa gente en el futuro. Nosotros nunca veremos los frutos de lo que hoy plantamos, pero es nuestra obligación velar por el futuro de la humanidad, de seguir así no hay final mas que la extinción. Debemos primero purgar, eliminar aquello que no sirve a un futuro sin imperfecciones. Nuestro hábitat está destruido, hay que darle un respiro al planeta. La humanidad que nazca de esto será guiada por un Dios verdadero porque cuando investiguen su pasado verán que fue cierto, hay miles de pruebas de su paso por el mundo. Fotos, imágenes, cientos de testigos que luego escribirán sobre él, un dios contemporáneo, es lo único que puede salvar a la humanidad. Hay miles de engranajes cumpliendo su función, están los provocadores, los que contienen, los almacenadores, los escribas, y los usados, que son aquellos no lo saben pero también están siendo parte del plan, en general cumplen un rol importantísimo pero no lo saben. Puede ser cualquier persona. Y vos sos…

_ El falso escriba.

_ Exactamente, tu labor era escribir en contra del mesías, tratar de convencer a la humanidad de su inexistencia… debemos generar una contracorriente para poder controlarla también y cuando sea necesario detenerla, tus escritos serían la doctrina de ese movimiento, pero simplemente la cagaron, debían seguirnos a nosotros, contactarnos, no ir por toda la ciudad a los golpes con Legión. Tenemos que solucionar ésto de alguna forma.

Pensé que esto realmente no daba para más. No quería escuchar una sola palabra más sobre la humanidad ni el futuro ni de planes para salvar a unos pocos descerebrados que se creen que pueden guiar este rebaño de corderos carnívoros y homicidas que somos hacia mejores pastos. Y nos volveríamos puras ovejitas, por favor, el hombre no se va a dar por vencido. Siempre iba a cagarla, Caín y Abel por siempre. Habían matado a Mía. Y quien sabe a cuantos más sólo por querer dominar el destino de la humanidad… no era negocio, me la habían quitado, me habían mentido y usado. El odio creció dentro de mi como un torbellino de imágenes, sabores agrios y muerte. Ésto no podía seguir. No podía permitirlo.

Miré hacia la puerta de entrada, los soldaditos del bien aún me apuntaban desconfiados, supongo que no iban a dejar de hacerlo hasta que no bajara yo el arma, cosa que no pensaba hacer.

_ ¿Y Legión? ¿Qué busca?

_ Destruir al mesías y con él nuestro único futuro posible.

_ ¿Y dónde está ahora?

_ Eso es información que no puedo compartir con vos… sólo puedo decirte que está a salvo. Pasará un tiempo en estas tierras, luego emprenderá su viaje de regreso a África donde crecerá recibirá sus enseñanzas, se revelará su verdadero ser y luego morirá a causa de este terrible mundo. Unos años después comenzará la ultima etapa del proyecto, construir una religión. Para ese entonces el mundo que conocés ya hace rato habrá desaparecido, se construirá uno nuevo, la ultima oportunidad.

Basta. Me sentía cansado, muy pero muy cansado. Asi que sólo apreté el gatillo, el arma se sacudió y ví como explotaba el pecho del señor Esquela y me preparé a recibir la lluvia de balas que caerían sobre mi pero a pesar de su corpulencia Adolfo saltó en un rápido movimiento y se interpuso ante mi y los hombres de Newlight a la vez que sacó un arma de no sé donde y abrió fuego. Todos abrieron fuego a la vez, el cuerpo de mi tío se sacudia mientras el gruñía como un oso pardo defendiendo a sus crías, el estruendo de las armas era ensordecedor. Explotó una cabeza, creo que la del gordito y luego el otro cayó hacia un costado agarrándose el cuello mientras un chorro carmesí cruzaba el aire. Se hizo el silencio. Adolfo se arrodilló y cayó hacia delante, supe al instante que estaba muerto. Y un segundo después algo húmedo bajó desde mi barriga hacia una de mis piernas, recién ahí me dí cuenta que me habían dado.

El señor Esquela habló jadeante:

_ Es imposible de detener.

_ Te voy a volar la cabeza, por mi tío.

_ No es tu tío… ése no es tu tío.

_ ¿A si? ¿Y quién era entonces? Contestá antes que dispare de nuevo.

_ Estás perdiendo sangre, en unos minutos vas a estar desmayado. Yo puedo ayudarte… y decirte la verdad. No es tu tío…-Acerqué el arma a su cara. Con mi otra mano presionaba la herida que ya era para ese momento un mar de fuego.- es tu viejo,tu papá …es verdad, tu viejo no murió, tu tío Adolfo fue quien murió en aquel accidente, por motivos operacionales se cambiaron las identidades, e imaginarás que el accidente no fue tal… nada pasa porque sí en este mundo…lamento que te enteres tan tarde, así es nuestro trabajo.

Apreté el gatillo tantas veces que me quedé sin balas.

Me arrastré como pude por las paredes y salí por detrás, me agaché por debajo de un alambrado y me alejé por una calle angosta que me pareció infinita. El sol aún no salía del todo, al menos en este lugar del planeta. Los altos edificios mantenían al nuevo día a raya.No quería pensar en nada. Sólo en Mía. Sólo en ella. Caminar y patear los recuerdos como si fueran hojas secas y muertas caídas del árbol de la esperanza. Nubes negras se avecinan en el futuro de la humanidad. La vida sigue sin tener sentido aún a pasos de la muerte, no se justifica tanto dolor. Al menos pude terminar de contarme mi historia, lástima no haber podido escribir sobre lo que estaba ocurriendo, abrirle los ojos a la gente, que se enteraran que nos estaban usando, como siempre. Es verdad eso del frio. Hace mucho frio… lo único que quiero es encontrarme con Mía, que esté ahí esperándome, y me abrace, y me dé calor… ¿ahí estás? No veo bien… ¿Sos vos Mía?


SEARCH BY TAGS
No hay tags aún.
FEATURED POSTS
ARCHIVE
bottom of page